Nuevos logros en los procesos de reproducción asistida
Aproximadamente un 40% de las parejas sometidas a tratamiento logran el embarazo deseado.
Ramiro Navarro , fertilidad | Actualizado 27.10.2014 – 11:05
Actualmente un porcentaje considerable de los problemas de fertilidad se resuelven con técnicas in vitro basadas en la Inyección Intracitoplasmática (ICSI). Aproximadamente el 40% de las parejas que se someten a estos procesos logran el embarazo deseado.
El abanico de técnicas y procedimientos disponibles ha revolucionado en los últimos años este ámbito.
La reciente celebración de las Jornadas de Reproducción de Almería, organizadas con motivo del XX aniversario de la Clínica Roquetas, congregó a más de 70 expertos implicados en distintas fases de los procesos de reproducción asistida (ginecólogos, embriólogos, matronas y enfermeras) .
El encuentro, desarrollado gracias al apoyo de Merck Serono, ha servido para repasar los nuevos retos existentes en el abordaje de los problemas de fertilidad.
Según explica Juan José Khouri Choufani, responsable de la Clínica Roquetas, en Almería, «aproximadamente un 15 % de las parejas va a necesitar un tratamiento de reproducción asistida; son aquellas que han intentado embarazo sin éxito durante más de un año«.
Por lo general, «tras el estudio básico inicial, un 40% de los casos responde a causas de origen masculino, otro 40% a causas de origen femenino y un 20% surgen por razones mixtas», indica. Tras estos problemas pueden existir factores de impacto medioambiental o relacionados con problemas hormonales o endocrinos.
Si el abordaje es la inseminación artificial el objetivo es conseguir un folículo de unos 18 milímetros, tras lo que se procede a la selección del esperma y su inyección en el útero.
En fecundación in vitro el proceso es más complejo. Según indica Khouri, «nos apoyamos en tratamientos hormonales para desencadenar la producción de más óvulos, con lo que conseguimos extraer unos 12 por vía vaginal ecoguiada».
Una vez que se recogen los ovocitos, la embrióloga los aísla y o bien se incuban en una placa con esperma o bien se procede a la Inyección Intracitoplasmática)». Esta última opción suele ser la mayoritaria, logrando unas tasas de embarazo del 40%. En unas 24 horas es posible comprobar cuántos han fecundado.
También hubo ocasión de analizar la morfología del embrión y las técnicas que permiten observar la progresión de las células. Los sistemas de observación embrionaria de tecnología time-lapse, llamados Primo Vision, permiten supervisar la calidad del embrión en tiempo real.